Me gusta medir su cuerpo con la mirada porque lo imagino a media luz mientras que el sonido de grillos le rodea.
Y su pelo, como maraña, no es más que un libro de libertades que quiero leer, y que se abre cuando respira y se cierra si se lo cubre, y yo, admiro que es una sirena y es mi mayor ejemplo de que la maravilla de tenerla a mi lado es solo lo que siente un fotógrafo en una jungla, donde ella es una pantera y yo quiero ser su árbol preferido.
Ella como animal es fantástica.
No hay comentarios:
Publicar un comentario